Muy buena respuesta a la Colecta anual de Cáritas: «Hoy podemos decir muchísimas gracias a la ciudad»

Esta semana, Cáritas Parroquial dio a conocer los números finales de lo que fue su colecta anual, tanto en las misas como en la realizada casa por casa, lo que se llevó adelante el sábado 8 de julio. 

«Hoy podemos decir que muchísimas gracias a la ciudad. El tiempo no nos acompañaba, pero habíamos hecho un poco de publicidad y la gente nos esperaba en su casa. Realmente fue muy gratificante porque tiene que ver con la solidaridad de la gente. Todo eso que a Caritas le queda, más allá de la gratitud, es lo poco o lo mucho que podemos hacer por el otro, y de eso se trata Cáritas», dijo Edith Ayala, destacando que el monto total de la colecta domiciliaria fue de 1.200.890 pesos. «De ese monto total -explicó-, un tercio va a Diocesana y dos tercios quedan en la Cáritas Parroquial. El tercio que fue a Diocesana, que ya fue depositado, fue de 400.290 pesos y los dos tercios que quedaron para Cáritas Parroquial, en el banco, suman 800.593 pesos».

Uno de los grupos que realizó la colecta domiciliaria, en este caso en Vec. Tropezón (Gracias por dejarnos tomar la foto!!!).

«Aproximadamente tuvimos casi un 100% de aumento de lo del año pasado… Un 98, yo quiero ser generosa y decir un 100», aclaró, en tanto que «la colecta de misas, que fue 10 y 11 de junio, sumó 112.654,50 pesos y eso también se divide en tres tercios, sólo que un tercio va a Cáritas Nacional, un tercio a Diocesana y un tercio queda en la Cáritas Parroquial. Ese tercio fue de 37.551,50 pesos. En lo de las misas, Gálvez tuvo un 337% más que el año pasado. O sea, lo de las misas fue muy bueno, no quiero decir con eso que el de domiciliaria no lo haya sido, pero bueno, también esto nos hace ruidito a poder trabajarla con más tiempo el próximo año».

En cuanto a en qué destinará lo recaudado, Ayala sostuvo que «todos los años decimos que se necesita en la parte edilicia, y con estos fríos también estaba pensado en hacer compra de frazadas, que hay un lugar donde nos pueden hacer precio por medio de Diocesana, pero realmente los números nos están ahogando con respecto a los costos de alimentos». «Estamos teniendo unos costos superiores al dinero, mucho más superior que a lo que nos entra por subsidio, así que más los socios y demás, estamos superando lo que entra, por lo que esperemos podemos llegar a hacer algo, pero creo que en estos tiempos solamente va a ir para alimentos». Y en ese sentido recordó que el comedor funciona tres veces por semana, si bien está abierto de lunes a viernes a partir de las 16 horas. Lunes, miércoles y viernes, a las 18 horas, se entregan viandas: «Estamos prácticamente en 130 viandas diarias. Se trata de dar pollo, carne, verduras, o sea que sea una buena alimentación nutricionalmente hablando».

Por su parte, el padre Carlos señaló quedarse «sin palabras frente a la generosidad, y sobre todo en el contexto en el cual estamos, que es un contexto en donde el dinero no es que nos sobra, al contrario, falta muchas veces. Y llegaron a un 100% casi más de lo que fue el año pasado. Yo la verdad pensé que me hacían una broma cuando me dijeron el monto, pero yo simplemente quiero valorar la generosidad y me venía a la mente el texto del Evangelio de la viuda que frente a todo lo que ponían, ella puso todo lo que tenía y eso lo valoró Jesús. Todo lo que tenía para vivir lo puso al servicio de los que menos tenían, entonces yo simplemente quiero decirles que no van a tener una recompensa en este mundo, pero sí Dios ve ese gesto y esa generosidad».

También se refirió a otro proyecto de Cáritas que es «comenzar a dar más talleres, empezar a usar el lugar que tenemos que es un lugar genial para dar más talleres, para empezar a enseñarle a la gente que se puede vivir de otra manera. Así que por eso agradecemos la generosidad de todos, y agradecer también a los que han colaborado, como decía Edith, en un día de lluvia y humedad. Entonces, qué lindo que todos hayan podido participar y redoblaremos la apuesta para el año que viene, porque hay barrios que nos han quedado, porque no teníamos más gente, y redoblar la apuesta de cada uno de ustedes para que el año que viene sea más todavía. Este año incorporamos también quedarnos en el semáforo y también la gente fue increíble cómo fue colaborando, cómo fue ayudando. Así que por eso, queremos agradecerles de corazón y seguir adelante en esto tan hermoso que es ayudar a los que menos tienen y buscarle la vuelta para que podamos hacer más dignas a las personas».