El Municipio gestionó ante Prodeco para que más de 300 motos y 3 autos sean compactados
En la mañana de este jueves, a través del Municipio comenzó a materializarse el programa PRODECO (Programa nacional de descontaminación y compactación de vehículos) en nuestra ciudad. «Por suerte se pudo lograr de hacer la tramitación para poder hacer la compactación de vehículos que, a partir de seis meses de estar en el corralón, ya el municipio puede disponer de los mismos», explicó Claudia García, jefe de Tránsito local, quien añadió que «se han hecho los edictos y aparte las notificaciones pertinentes del juzgado de faltas».
Agotada la instancia administrativa, en esta oportunidad hay para compactar 312 motocicletas y tres automóviles. «Para nosotros es un alivio porque son muchos vehículos, había dos corralones llenos de motos y ahora podemos librar espacio para poder seguir trabajando, porque si no también llegábamos a un punto de cuello de Botella donde no podíamos seguir», explicó, «con lo que es también el peligro de tener vehículos tanto tiempo. Hemos sufrido robo en los corralones varias veces y eso nos implica algo muy engorroso por el tema de hacer relevamientos y ver qué vehículos se robaron, o qué parte de los vehículos se llevaron. Entonces sacar todo esto de encima, que es un peso muy grande, es una forma de comenzar de nuevo».
«Ahora que se logró avanzar con el programa PRODECO que es de Nación, y como hacen otras municipalidades, cada seis meses se puede hacer esta compactación. Hoy vinieron los camiones con grúa para trasladarlos y los van a llevar a Rosario, donde está la compactadora», añadió García, destacando que lo recaudado de la venta de la chatarra que se genera «va a dos entidades públicas, benéficas, en este caso a Reserva Canina y a el Comedor Santa Margarita».
La funcionaria recordó que «uno lo que le pide siempre es que andemos en regla para tratar de evitar que los vehículos vayan al corralón y, en lo posible, si lo llevan, sacarlo de inmediato para que no llegue a esta instancia».
Al momento el Municipio contaba con dos corralones, un depósito en calle Lisandro de la Torre y Rivadavia – «que ahora se va a dejar para utilizar para emplearlo en otras cosas para el Municipio»- y quedará solamente el de Avenida República -«debimos usar éste de Lisandro de la Torre porque el otro no daba más-«.
