Fiesta de la fe en Gálvez junto a la imagen del Cura Brochero
«Yo destacaría dos cosas: la emoción, en primer lugar, porque fue algo maravilloso como se armó todo esto, y en segundo lugar, lo que más me impactó, es la necesidad de ver a un Dios concreto y cercano, que se manifiesta a través de un santo bien nuestro, bien argentino».
De esta forma, el cura párroco Carlos Magnano analizaba este domingo lo vivido en la tarde y noche del sábado, con la entronización de la imagen del Cura Brochero en la ciudad, previo procesión y misa. «Jorge Kenig, que es muy devoto por una situación particular de su vida, se enamoró del Brochero y empezó con toda esta idea de por qué no lo traemos. Y fue tanta la emoción porque había mucha gente que, de la nada, preguntaba a qué hora era la misa porque quería ir, quería recibir la bendición, la Eucaristía, y querían que se les imponga el poncho. La emoción de ver caminar a la gente en la procesión, e imaginarse que Brochero hacía 200 kilómetros en mula, con 500 personas llevándolas a hacer retiro, así que lo que nosotros humildemente pudimos hacer ayer, fue muy emocionante», relató, destacando que «al principio éramos poquitos, y después se fue sumando gente, y cuando llegamos allá, había alrededor de unas 200 personas, con gente que yo no veo habitualmente. Por eso la emoción de decir que Brochero sigue vigente. Y después, esto de la necesidad de un dios cercano y concreto, a través de la imagen de un santo, de tocar un poncho, yo veía las caras de las personas, la alegría, y uno se llena, pero a la vez quedás atónito, porque te das cuenta de que por más que vos hagas lo que hagas, digas lo que digas, Dios siempre está ahí».
Y luego de la celebración, «donde la ciudad vivió un momento de gracia, un momento de fe, un momento de profundidad, un momento de realmente encomendarle a Dios a través del Santo, en este contexto del dengue, donde uno vuelve a estar asustado, ver este faro de esperanza, es un cúmulo de emociones que todavía siguen… Se pudo hacer un festival folklórico que fue hermoso porque todos ad honorem vinieron a cantarle al Curita Brochero, y es algo que queremos hacer, instaurar en Gálvez este festival… Humanamente no se quedó tanta gente al festival como yo esperaba, pero bueno, es algo nuevo, y yo destaco los cantantes con la alegría que lo hicieron», pasando por el escenario el Coro Flores de Plata, «A pura danza», Gabriel Sartor, Lorena Batistti, Matías Román, Gastón Velásquez y Chacareando ando.
«No hay perder de vista lo hermoso de la fe -sostuvo Magnano-. Creo que eso es lo que marca esto. Yo lo que viví anoche fue una fiesta de la fe, una fe que está intacta, una fe que está viva, una fe que tenemos que profundizar, una fe que ojalá todas esas personas todos los domingos puedan participar en la Eucaristía. La verdad que fue increíble y maravilloso».