Baja vacunación en niños: «Hay un riesgo real de que puedan volver a aparecer infecciones»
Profesionales de la salud insisten en que los padres lleven a vacunar a sus hijos, un hábito que parece haberse perdido tras la pandemia del coronavirus
La baja vacunación en niños a nivel nacional «es un hecho»: así lo resaltó la ex ministra de Salud de la provincia de Santa Fe Andrea Uboldi. La médica infectóloga y pediatra remarcó que en este escenario en el que se está saliendo de la pandemia hay un riesgo real de contraer ciertas enfermedades.
«Es una campaña nacional destinada a una población particular que son los niños y niñas que están cumpliendo los 13 meses hasta antes de cumplir los 5 años. Tiene el objetivo de una dosis extra, es decir que independientemente de que los niños y niñas tengan el carné completo necesitamos esta dosis extra de sarampión, paperas y rubeola, que es la triple viral y una dosis extra la poliomielitis que se denomina salk», indicó la profesional.
Uboldi resaltó la baja tasa de vacunación que se está dando: «Venimos teniendo problemas para que la gente comprenda la importancia de esta dosis extra y que se acerque a los efectores de salud para vacunar a los niños».
La profesional consideró que esta situación no está exenta de la pandemia, donde se dio un exceso de información en las redes sociales, así también como gente que divulgó datos que confundieron. «Hay un cansancio de la gente con respecto a las vacunas y esto vinculado con las vacunas covid y las dificultades en la comunicación. Es decir, poder explicar bien y tener mucha más presencia en los medios masivos de comunicación para que gente entienda que esta es una campaña muy importante para tratar de evitar que algunos de estos niños puedan adquirir estas infecciones que hay ya hace mucho tiempo. En estos momentos estamos en un riesgo real de que puedan volver a aparecer», señaló.
La ex titular de la cartera de salud contó que Latinoamérica es uno de los territorios con más fuerza en cuanto a vacunas y que venía con muy buena protección ya que la mayoría de la población se adhiere a las vacunas. En Estados Unidos, Europa y África el escenario es distinto, al tiempo que expresó: «En el caso de la polio, hay países como Pakistán y Afganistán que mantienen aún la polio salvaje y el gran tema de la reaparición o el riesgo de estad enfermedades está vinculado a la globalización».
«Llevar a los niños a vacunar no sólo está vinculado con que la gente no quiere llevarlo sino que hay múltiples situaciones que se presentan relacionadas a si las personas encuentran la vacuna, si en el horario en el que vacunamos les viene bien, si la gente tiene otros problemas sociales que haga que posterguen una atención sanitaria. A eso hay que sumarle lo que significó la pandemia, donde hubo un miedo en ir al efector, nosotros mismos les dijimos a la gente «quédense en casa». Esto retrasó la situación de la vacunación», explicó la ex ministra.
Apuntó que la pandemia complicó también lo comunicacional, la reorganización del sistema de salud para tratar de otros problemas diferentes al covid, la situación social y el humor de la gente respecto a determinadas situaciones que afectan, inciden en la adherencia o no a las vacunas.
Destacó que se está dando una percepción del riesgo distinta a la de hace unos años ya que hay un sector de la población que creció y tuvo hijos en un contexto en el cual la vacuna ya estaba presente, por lo tanto la enfermedad no existió ni la vio. Y sentenció: «Por lo tanto la gente comienza a preguntarse ¿Para qué vacunarse si la enfermedad no existe? Cuando en realidad en un círculo establecido por el beneficio de la vacunación a partir de hacer desaparecer muchas enfermedades que generaron muchísimos problemas y que no tienen tratamiento especifico. O sea que si a alguien empieza con un sarampión o una polio, no tengo una medicación específica para poder mejorar esta situación», expresó la ex funcionaria.
«En este momento estamos teniendo una situación de incrementos importantes en la circulación del virus de la gripe, entonces esto parece raro porque estamos en la primavera y en general uno espera la gripe en otoño e invierno. Pero está vinculado, primero con el gran peso que tuvo el covid como que corrió a todos los otros virus y ahora están reapareciendo. Por otro lado, el relaje de medidas de autocuidado que podían hacer cierto control», sostuvo.
Esto último que reveló tiene mucho impacto en la población infantil, con cuadros de fiebre alta de tres o cuatro días, dolor de cuerpo, tos, vómitos y diarrea. Reveló que a partir de un caso intrafamiliar la mayoría del grupo familiar también se contagia. «A todo el mundo le parece que se tiene que vacunar para gripe solo en otoño o en invierno y hay que vacunarse para la gripe, si uno tiene indicación, durante todo el tiempo que circule el virus», resaltó y apuntó su recomendación para los niños de seis meses a dos años, mujeres embarazadas y personas que tienen alguna condición de salud.