«Mi perro no es una mascota, es parte de mi familia»

Hoy conocemos la historia de Flor, una perra preciosa que busca un hogar… La encontraron perdida, deambulando porque no puede ver, pero queremos encontrarle un rumbo a su corazón!!!

«Hola, soy Flor.

Quizás no pueda ver el mundo como ustedes, pero lo siento con el corazón. Conozco la ternura de una caricia, el calor de un abrazo, el sonido dulce de una voz que me llama con amor.

Hace un tiempo me encontraron caminando sin rumbo, perdida, con mis ojitos apagados pero mi alma llena de ganas de vivir. Nadie me buscó, nadie me reclamó… y entonces entendí que la vida me estaba dando la oportunidad de empezar de nuevo.

Soy una perra cruza de ovejero, tranquila, cariñosa y muy agradecida. Aprendí a moverme guiada por los sonidos y el amor de quienes me cuidan, y aunque no pueda ver, sí puedo darte lo mejor de mí: fidelidad, compañía y ternura infinita.

Yo no necesito lástima, necesito un hogar. Un lugar donde mi discapacidad no sea un obstáculo, sino una razón más para amarme, porque yo ya sé amar sin condiciones.

Si abrís tu corazón para mí, prometo llenarte los días de alegría y enseñarte a mirar el mundo con los ojos del alma.

Soy Flor, y estoy esperando a mi familia».